¿Dónde está Alejandro Martí(El padre del joven “Martí” secuestrado y asesinado en agosto) exigiendo la renuncia de los secretarios de Estado y del mismo Calderón?
¿Dónde están los líderes de “Iluminemos México” convocando a una nueva marcha en contra de la violencia y clamando por la revocación de mandato?
¿Dónde están todos esos que, como plañideras profesionales, lloraban la tragedia de un solo joven asesinado y hoy guardan silencio ante la ola de muertes indiscriminadas?
¿Dónde están las televisoras dando cobertura completa a las muertes ocurridas en Morelia y sus sensibleras cápsulas informativas al respecto?
No es su culpa, pero por el simple hecho de no pararse y declarar respecto de las muertes del 15 de septiembre, Alejandro Martí, las televisoras, el Consejo Coordinador Empresarial, “Iluminemos México”, todos ellos quedan como lo que son: hipócritas. Pues si antes solicitaban el apoyo del pueblo para sumarse a sus causas ahora los abandonan y ni un peso han invertido en spots que condenen la violencia. Alejandro Martí ha perdido un hijo, en Michoacán ocho familias quedaron mutiladas por la
muerte de los suyos. La única diferencia que veo entre los dos ejemplos es sólo el nivel conómico entre uno y otros. Nadie marcha. Los únicos redobles que comienzan a retumbar son las botas militares que se prestan a salir a las calles de la capital Purépecha para justificar la intentona privatizadora que se cierne en los próximos días aprovechando la conveniente (y muy a tiempo) tragedia sucedida. Qué casualidad que este lamentable evento coincidiera con el inicio de sesiones en las Cámaras. Igual de conveniente que el cerco de muertes y explosiones que rodean a la capital del país, de esta forma no sería extraño que mañana sucediera lo mismo en el DF para así terminar con la simulación y militarizar la capital de una buena vez.
¿Hay quien beneficia un atentado de esta naturaleza? Es evidente que no le sirve al crimen organizado pues con estas acciones sólo provocan ser el foco de atención de las “autoridades”. Pero, ¿si no son ellos?, ¿quién entonces?... Un personaje ha salido a luz y brinda cobijo y esperanza... y llama a la unidad nacional. Pues aquí lo tienen. Este sangriento hecho sólo sirve al gobierno… y es por ello que los hipócritas mencionados al inicio han guardado silencio, mientras que Calderón hace un llamado totalmente fuera de contexto en el que menciona que el atentado no debilitará al Estado; Una analogía, como la cruzada de Bush cuando las Torres Gemelas sucumbieron por motivos aún cuestionables. Así, entre hipócritas, víctimas inocentes, cientos de heridos, acarreos de militares y la estatización del terror, veremos pronto cómo el país se transforma en un fortín donde será muy complicado ser libre o poder trasladarse de un lugar a otro mientras que en las cámaras legislativas se pretende aprobar la privatización de Pemex en los próximos días, y no creo que sea un golpe de suerte del inquilino de los Pinos. Con dolor les comento que en el fascismo se hace uso de la induccion mediatica, y se aprueba el asesinato para darle la continuidad al aparato político y el regimen conservador. Con dolor veo, no un parecido, más bien un ejemplo...
viernes, 31 de octubre de 2008
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